Punto 0. Entrada a la Cueva
Bienvenido a la Lora de Valdivia. Desde aquí comienza un recorrido con esta audioguia por algunos de los parajes que hemos seleccionado para que conozcas un poco mejor este Espacio natural protegido de Covalagua en el que te encuentras y que incluye la Cueva de los Franceses, el menhir de Cantohito, Pozo lobos, el mirador de Valcabado y algunas cosas más que iremos desgranando en nuestro paseo.
La lora de Valdivia comparte territorio burgalés y palentino debido a su gran amplitud que se extiende hacia el este, lo que se conoce como el Páramo de la Lora. Forma parte de un paisaje singular formado también por la Lora de las Tuerces, Peña Mesa, la Ulaña y Peña Amaya. Todas estas mesas o loras destacan en el paisaje, como si fueran verdaderos castillos y en muchos casos, a lo largo de la historia, han actuado como fortalezas y refugios naturales para sus habitantes.
Si tienes tiempo te aconsejamos que las visites pues todas ellas guardan verdaderos tesoros geológicos, biológicos y culturales. Este edificio en el que nos encontramos ahora, que sirve de entrada a la Cueva de los Franceses, fue inaugurado en el año 2009 por la Diputación de Palencia. Alberga una serie de elementos interactivos y maqueta que ayuda al visitante a comprender como se forman las cuevas y todo lo que hay dentro de ellas. Durante la visita con la audioguia podrás conocer todos los detalles de cómo el agua ha ido esculpiendo y modelando todas las increíbles formas que aparecen en su interior.
En ocasiones el agua, además de recorrer el interior de las cuevas, sale hacia el exterior, como ocurre en la surgencia de Covalagua, que da origen al río Ivia. Puedes visitar esta preciosa cascada natural dejando el coche en una zona de aparcamiento que hay antes de llegar a la Cueva de los Franceses y recorrer a pie los escasos 500 metros de camino que hay marcado.
Una vez allí podrás observar como el agua ha ido modelando diversos escalones en la cascada pero no por erosión de la roca sino porque el carbonato de calcio que lleva disuelto precipita sobre las hojas, ramas y musgos que encuentra a su paso formando lo que se conoce como un edificio tobáceo. El siguiente punto está en la parte trasera de la Cueva, en el comienzo de ruta a Cantohito.
Punto 1. Diaclasas
En esta parte palentina de la Lora de Valdivia nos encontramos a una altura que oscila entre los 1.170-1.200m. En este recorrido con la audioguia hacia Cantohito, que está una distancia de unos 1.000m, encontrarás varios puntos como este que te darán información acerca de alguna de las características más importantes de esta zona.
Para empezar el recorrido con la audioguia, si observas con detenimiento el suelo, en muchos de los lugares de esta lora da la sensación de que el suelo está formado por grandes baldosas rectangulares de piedra caliza separadas unas de otras por finas líneas de vegetación. Estas líneas no son sino fracturas que presentan las calizas y son muy importantes para el desarrollo de las cuevas ya que por estas grietas es por donde se filtra el agua de lluvia hacia el interior produciendo los procesos de disolución y precipitación del carbonato de calcio dentro de la misma. Estas fracturas reciben el nombre de diaclasas.
Si tienes la oportunidad de mirar una fotografía aérea (como la que hay en las marquesinas del área de descanso de Revilla de Pomar) distinguirás perfectamente esta red de diaclasas, al igual que las dolinas y los lapiaces de los que hablaremos en las siguientes paradas. El siguiente punto a visitar se puede ver desde aquí y está a pocos metros a nuestra izquierda, la sima, rodeada por un murete de piedra con forma circular.
Punto 2. Sima
Esta grieta natural ha sido, también, el resultado de los procesos erosivos del agua. Tiene una caída de 8 metros y comunica con el interior de la Cueva. Durante la Guerra de la Independencia, en 1808, las tropas Napoleónicas lucharon contra los Húsares Cántabros, que eran una unidad de caballería ligera, y estaban liderados por el brigadier Porlier. Fue una batalla cruenta que finalizó con la victoria de las tropas españolas. Como había dificultades para enterrar a todos los muertos se optó por tirar a los caídos franceses a la sima. El descubrimiento de este enterramiento contabilizó unos 70 cadáveres.
Aunque ya desde 1898 hay documentos que hablan de la Cueva y sus alrededores, fue en 1904 cuando don Luciano Huidobro Serna, párroco de Villadiego, dio los primeros pasos para que las Autoridades públicas la dieran a conocer. También está recogido el uso que, esta y otras cuevas de la zona, han tenido posteriormente, durante la Guerra Civil. Durante ese periodo fueron refugio de la Guerrilla Republicana palentina, concretamente se tiene conocimiento de la cuadrilla llamada “La Langosta” que operaba por la zona de Valdivia. El siguiente punto de la audioguia lo encontrarás en el primer cono de piedras que se ha construido a modo de hito para señalizar el camino hacia Cantohito.
Punto 3. Geología
Lo primero que has de saber es que todo este paseo que te proponemos con la audioguia lo harás caminando por lo que hace 90 millones de años fue el fondo de un océano. Las rocas calizas que ahora vemos fueron los sedimentos depositados en el fondo de un mar que se extendía a lo largo de todo este territorio durante el Cretácico superior.
En la zona aparecen numerosos fósiles que nos proporcionan información muy valiosa acerca de ese periodo geológico. Es común encontrar rudistas y corales formando verdaderos arrecifes. La presencia de estos organismos fosilizados nos indica que hace 90 millones de años esta zona estaba ocupada por un mar poco profundo, con temperaturas de agua cálidas, propias de zonas tropicales.
Todos estos sedimentos marinos, debido a increíbles fuerzas internas de la tierra, hace 30 millones de años fueron plegados y fracturados, emergiendo del océano para formar parte de la península ibérica en un evento geológico denominado “Orogenia Alpina”. El siguiente punto de la audioguía lo encontrarás en el cono de piedras que se encuentra más adelante.
Punto 4. Dolina
Las rocas calizas están formadas por carbonato de calcio. Este compuesto se disuelve con cierta facilidad en aguas que contienen dióxido de carbono, o lo que es lo mismo CO2. Esta característica de la caliza genera un tipo de paisaje muy especial denominado kárstico. Así estos procesos de disolución en el interior del subsuelo generan las cuevas con estalactitas y estalagmitas, galerías subterráneas, etc. Pero en el exterior también podemos encontrar numerosas morfologías típicas de este paisaje.
Una de las más significativas son las dolinas, hoyas u ogas como las llaman por aquí. En nuestro camino con la audioguia hacia Catohito atravesaremos o rodearemos algunas de ellas. Las dolinas son pequeñas depresiones geológicas de forma más o menos circular que se producen por la disolución de la roca caliza del suelo. En las primeras etapas de su formación se producen encharcamientos por el agua de lluvia y esa agua acumulada se va filtrando a través de grietas hacia el subsuelo disolviendo a su paso el carbonato de calcio de la roca caliza y dejando en el fondo los minerales arcillosos que no son solubles en agua. En toda la lora de Valdivia existen numerosas dolinas. Algunas de ellas se han utilizado como zonas de cultivo debido a que el suelo arcilloso que contienen es muy fértil.
En ocasiones, las dolinas se forman por el hundimiento de una cavidad que se encuentra justo debajo, produciéndose unas hoyas con forma de embudo. Hacia el sur de la lora de Valdívia, cerca ya de Cantohito, aparecen dolinas de gran tamaño que incluso albergan avellanos, quejigos o melojos que crecen al abrigo de estas depresiones tan espectaculares. El siguiente punto de la audioguia lo encontrarás en el cono de piedras que se encuentra más adelante.
Punto 5. Flora
Las condiciones climáticas de las loras son bastante duras. Las temperaturas a lo largo del año son muy variables y extremas y el viento azota con intensidad estas parameras. Además el agua de lluvia se filtra por las grietas o diaclasas rápidamente lo que hace que la humedad sea escasa, esto junto el pobre suelo que generan las rocas calizas provoca que solo algunas especies vegetales sean capaces de adaptarse y vivir aquí. Son las llamadas plantas rupícolas, que nacen entre las grietas de las rocas. Entre ellas destacan la oreja de liebre, el té de roca o la campanilla.
Cuando hay un poco de suelo, como ocurre en las dolinas incipientes que has ido atravesando, crece el brezo, la gayuba y la aulaga, el carraspique, el milamores y alguna que otra extraña orquídea que están catalogadas como especies protegidas. Pero, claro, todas estas plantas sólo podrás verlas en flor ya bien entrada la primavera.
En las dolinas más desarrolladas, al abrigo de estas depresiones, las condiciones climáticas son algo mejores y pueden crecer especies arbustivas como el avellano, espino albar, enebros o escuernacabras. En sus paredes crecen algunos helechos como la doradilla o el culantrillo y también podrás ver el ombligo de venus.
Punto 6. Fauna
Escuchemos ahora la audioguía que nos habla de la diversa fauna que habita en las Loras en general y en la Lora de Valdivia en particular. Las características geológicas y la evolución que ha tenido el paisaje han dado lugar a una serie de paredes muy verticalizadas como las que podrás ver a los pies del mirador de Valcabado. Es aquí donde anidan, bien protegidas, algunas aves rapaces como el buitre leonado, el cernícalo vulgar, el alimoche, el búho real o el halcón peregrino. También hay córvidos como las chovas piquirrojas y las cornejas y veloz vuela el avión roquero. En la primavera, por el páramo, podrás oír el canto de la alondra común, la totovía y alguna collalba gris y si tienes suerte verás algún aguilucho cenizo buscando comida.
Pero no sólo podrás encontrar aves en nuestro recorrido, mamíferos como el zorro y la garduña se cobijan entre estas rocas. Los corzos son habitantes comunes de la Lora y ya, muchísimo más esquivo, el lobo atraviesa este territorio.
Escondidos entre las piedras aparecen también invertebrados. Numerosas especies de arañas y multitud de insectos encuentran en la lora un buen lugar para sobrevivir. Especial interés tienen los reptiles en estas zonas. Hay eslizones, lagartos verde y ocelado y culebras como la lisa meridional y la viperina. Tendremos especial cuidado si levantamos alguna de estas rocas pues las víboras también se refugian debajo de ellas. Toda esta fauna ha sabido adaptarse a las duras condiciones de la Lora. El siguiente punto de la audioguia lo encontrarás en el poste de dirección que hay justo antes de llegar a Cantohito.
Punto 7. Cantohito
Este menhir de piedra caliza, que tiene una altura de 3m y 25 cm y una inclinación hacia el este, es uno de los abundantes megalitos que encontrarás en esta Lora de Valdivia. Junto con otros elementos hallados en Burgos, en la zona norte de Palencia y en Cantabria constituyen un excelente conjunto. Estos menhires forman una lineación SE-NO pero existen varias interpretaciones acerca de esta peculiar orientación. Se ha hablado de que podrían ser marcas en el territorio para indicar rutas, trazar límites fronterizos o ser lugares de encuentro. También podría tratarse de una avenida funeraria o tener un carácter simbólico o un significado ritual ya que algunos ejemplares muestran grabados en su superficie. Lo cierto es que hay que imaginarlos en su contexto, hace 6.000 años, con comunidades agropastoriles que habitaban y se desplazaban por estos territorios en busca de pastos y resulta difícil decidirse sólo por una de estas teorías sin tener más datos. Las investigaciones continúan con nuevos hallazgos, dataciones y reconstrucciones. El círculo de piedras que rodea al menhir parece ser muy posterior.
En nuestro recorrido con la audioguia os habrá llamado la atención una serie de pequeños muretes que aparecen salpicados por toda la Lora. En realidad son cortavientos que los pastores, en épocas más recientes, construían a modo de pequeños refugios mientras el ganado pacía libremente por los alrededores. Los lugareños los llaman Casitos. Si sobrepasas Cantohito y avanzas unos pocos metros en la misma dirección encontrarás dos dolinas bien desarrolladas, una a cada lado.
Punto 8. Los lapiaces
Caminando con la audioguia por las loras recorrerás suelos rojizos, procedentes de la alteración de la roca caliza, en otras ocasiones suelos almohadillados por la vegetación que los cubre pero otras veces pisarás un suelo rocoso agrietado, con formas extrañas. Son zonas por las que se hace difícil andar y que desgastan las suelas del calzado y las almohadillas de las patas de los animales. En geología se ha llamado lapiaz y es el resultado de la disolución de la roca caliza por el agua. Así se van creando surcos, algunos más profundos que otros y crestas afiladas de roca. Paso a paso el agua se adentra en el macizo calizo disolviéndolo en su interior para formar las cuevas, galerías y simas.
Poco a poco, a lo largo de mucho tiempo, los surcos, las diaclasas y las cavidades se van ensanchando por la acción erosiva del agua, se producen desprendimientos y hundimientos y formas caprichosas, una “ciudad encantada” como la que puedes visitar en el Espacio natural de las Tuerces a pocos kilómetros de aquí, es lo que en geología se llama paisaje ruiniforme.
Punto 9. Valcabado
Este mirador que nos propone la audioguia supone un espectacular balcón sobre el valle de Valderredible. Mayoritariamente cántabro tiene, como si de islas se tratara, pueblos pertenecientes a la provincia de Palencia como son Berzosilla, Lastrilla y Cezura. En el panel interpretativo podrás ver con detalle los nombres de todas las poblaciones que se divisan y su localización exacta. A nuestros pies el monte Ahedo, espeso hayedo que alberga agradables paseos. Si miras más a la izquierda tendrás toda una magnífica visión de la Montaña Palentina con sus cumbres más altas como el Valdecebollas, el Espigüete o el Curavacas. Hacia la derecha del Valle de Valderredible también podrás ver la parte Burgalesa de la lora de Valdivia llamada Páramo de la Lora o de la Pata del Cid, salpicada por los aerogeneradores que se yerguen como gigantes.
Pero desde este lugar no solamente hay esta magnífica vista. Si te das la vuelta podrás observar toda la amplitud de la Lora de Valdivia. Desde aquí se aprecia con claridad ese paisaje agreste y evocador a la vez tan característico de estos páramos calizos, y al fondo, Peña Amaya y Peña Ulaña dos de las loras más representativas de este relieve. El siguiente punto de la audioguia se encuentra en un poste direccional próximo a Pozo lobos.
Punto 10. Pozo Lobos
Pozo lobos: así se conoce a esta estructura reconstruida de una antigua trampa lobera. Durante siglos sirvió para capturar y abatir lobos. Esta construcción constaba de un callejón con muros altos levantados con piedras o palos, de varios centenares de metros de longitud que se iba estrechando, a modo de embudo, hacia donde los pastores azuzaban al lobo conduciéndolo, así, hacia la parte circular, el pozo. Este estaba rodeado de una empalizada que no permitía escapar al animal una vez dentro. Atrapado el lobo le arrojaban piedras desde lo alto para darle muerte.
Trampas de este tipo o similares se ha construido en las regiones donde su economía estaba basada en la ganadería y el lobo suponía una amenaza para la misma. Actualmente la presencia del lobo en esta zona es escasa aunque ocasionalmente se le puede observar atravesando estos páramos.
Audioguías Bluehertz ha realizado el servicio de audio guías para la Cueva de los Franceses y alrededores, disponible en los idiomas español, inglés y francés.
Cueva de los Franceses: Revilla de Pomar - 34813 (Palencia, España)
- Tel.: +34 659 94 99 98 - cuevadelosfranceses@diputaciondepalencia.es - www.lacuevadelosfranceses.es
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